La cultura japonesa y el papel

El papel ha desempeñado una función destacada en la vida cotidiana y en la cultura de Japón. En 2014 la UNESCO inscribió el arte tradicional de fabricación manual de papel japonés en la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad, reconociendo así el excepcional trabajo de generaciones y generaciones de artesanos que, durante centenares de años, han trabajado para mantener las tradiciones elaborado papel japonés de manera artesanal.

La elaboración de papel tradicional japonés se remonta a hace más de 1.300 años y sus procesos han ido pasado de generación a generación sin sufrir grandes cambios. Las técnicas de la fabricación del papel llegaron a Japón procedentes de China, el papel se hacía de elementos naturales como el cáñamo y fibras de plantas autóctonas como kozo (morera del papel), gampi y mitsumata y el proceso conllevaba mucho tiempo y esfuerzo.  La atención al mínimo detalle y la elegancia están presentes en todo el proceso de elaboración del papel.

Uno de los productos japoneses más populares es el papel washi; es bonito, natural y lo hay con toda clase de estampados y diseños.  La palabra washi literalmente significa “papel japonés”. El washi es el papel tradicional japonés, de gran prestigio y calidad,  pasó a utilizarse con diversos propósitos debido a que es resistente, bello y muy versátil; ha llegado a desempeñar muchas funciones en la vida cotidiana de Japón y muchas de ellas perviven en la actualidad convirtiéndose en parte de la estética tradicional japonesa.

Gracias a su proceso de elaboración, el papel washi es normalmente más fuerte que el papel que se hace con la pulpa del árbol. Es básico en la elaboración de biombos de papel, paraguas y parasoles japoneses o puertas correderas tradicionales, entre otras muchas cosas.  Su principal cualidad es que deja pasar la luz al mismo tiempo que oculta lo que hay detrás de él: sólo deja ver las sombras, ha iluminado las noches japonesas, en forma de farolitos colgantes y linternas portátiles, y ha disipado los calores del verano refrescando a generaciones de japoneses con abanicos y paipáis.

Hay una gran variedad de papeles washi, dependiendo del proceso de elaboración y el origen del mismo, como son el chiyogami y el yūzengami, que incluyen motivos propios de los kimonos a partir de grabados de madera y se utilizan para envolver regalos. El papel tradicional está presente también en las cintas de enmascara  que gozan de gran popularidad, con las que se decoran agendas y tarjetas de felicitación. Se utiliza en una enorme variedad de actividades artísticas típicas de Japón, tales como el shodo (caligrafía) y el arte ancestral del origami que es el arte japonés del plegado de papel.

Leer Comentarios

Comentar

× COTIZA AQUÍ